Si de algo estoy segura es de que Marcelino, mi padre, ha sabido transmitirnos desde siempre su ilusión y optimismo por esta profesión. No en vano, durante muchos años la figura del procurador siempre ha estado presente en mi vida.
Además de Licenciada en Derecho, soy Licenciada en ADE. Posteriormente realicé un Máster en Liderazgo Humano y Profesional y un Máster en Derecho Laboral. Considero que mi extensa formación académica queda fuertemente reforzada por el hecho de haber estado en contacto directo con la procuraduría desde mis años de universitaria, conociendo desde mis inicios profesionales todos los ámbitos de nuestra profesión, algo que, sin duda, ha enriquecido enormemente el desarrollo de mi carrera como Procuradora.
En mi opinión, un valor añadido de nuestro despacho y, al mismo tiempo, parte de nuestra filosofía, es el perfecto equilibrio entre experiencia y juventud. La veteranía de una parte del equipo que, unida a la posterior incorporación de gente joven como yo, ha logrado que todo el equipo de profesionales que formamos Servicios Jurídicos Bartolomé Procuradores tengamos una visión global de nuestra profesión y formemos un gran equipo.
Somos un equipo intergeneracional y estamos orgullosos de ello. Aunamos experiencia y reputación con modernidad e innovación para poder ofrecer a todos nuestros clientes un servicio integral, adaptándonos de manera continua e innata a las nuevas necesidades en el ejercicio de la procura.
Asimismo, la incorporación de las nuevas tecnologías en el desempeño de nuestra profesión ha sido una evolución lógica a la que hemos sabido adaptarnos con facilidad. La digitalización de nuestros servicios es un claro ejemplo de ello. Me atrevería a decir que somos uno de los primeros despachos de procuradores en Madrid que desde hace años trabajamos con toda la documentación en formato digital, algo que sabemos que nuestros clientes agradecen enormemente y potencia que depositen su confianza en nosotros.
Así como el cambio de papel a digital, la incorporación de nuevas tecnologías en el ejercicio de la procura será una realidad en el futuro. Pero no nos intimidan los cambios. Sabemos que estamos bien preparados para afrontarlos y no dudaremos en incorporarlos eficazmente siempre que impliquen la mejora de los servicios que ofrecemos a nuestros clientes.
Me considero una Procuradora del Siglo XXI. Miro al futuro de nuestra profesión con decisión, confianza e ilusión. Confío plenamente en el imprescindible rol que tenemos los procuradores para potenciar un buen funcionamiento de la justicia en nuestro país. Trabajo con afán a diario para que así sea y, con esa misma ilusión y constancia, trabaja día a día todo nuestro equipo. Siempre en pos de nuestros clientes y abogados.
